La pérdida de cabello constituye hoy en día una de las principales preocupaciones estéticas tanto para hombres como para mujeres, aunque ambos sexos no lo viven de la misma manera. En este artículo os explicaré como están de conectadas la alopecia y la psicología.
La alopecia no solo significa la pérdida del cabello sino que también hace referencia a una disminución de la cantidad de cabello y un adelgazamiento del mismo.
Causas de la alopecia
Las alopecias tienen diversos orígenes se pueden clasificar en:
Primarias: se produce una destrucción intrínseca del folículo. La mayoría no son congénitas (no se presentan desde el nacimiento). Entonces, este tipo de alopecias aparecen a lo largo de la vida, si bien la mayoría están relacionadas con cierta predisposición genética (hormonal como en el caso de la alopecia androgenética o autoinmune como en la alopecia areata o las cicatriciales).
Secundarias: son consecuencia de una destrucción folicular por agentes externos.
Teniendo en cuenta el origen y la pérdida o no de la capacidad de recuperar el folículo piloso también se clasifican en cicatriciales o no cicatriciales.
Alopecias más frecuentes
La alopecia androgenética es la más frecuente. Estas alopecias están producidas por una miniaturización de los folículos pilosos. Existe un factor genético que provoca que folículos pilosos se vuelvan susceptibles de ser afectados por los andrógenos.
De esta forma, en las zonas del cuero cabelludo donde se encuentra dicho receptor, que hace que los folículos sean sensibles a los andrógenos, existirá una disminución de la actividad folicular hasta su total desaparición.
Otra alopecia frecuente es el efluvio telógeno. Son alopecias difusas que se presentan de forma aguda. Los factores que influyen son muy diversos y producen una detención del ciclo folicular justo en la fase telogénica.
Alopecia y psicología
Seguramente ya hayas sufrido de algún problema de piel y que coincide con un momento de mucho estrés y preocupación que estés experimentando en un momento dado de tu vida.
Esto se debe a que la psicología y la piel están muy conectadas. El sistema nervioso y la piel nacen del ectodermo, es decir, de una misma capa embrionaria.
Como habíamos comentado, ambos sexos no se toman de la misma manera las patologías capilares. En el caso de los hombres, hay quienes se lo toman con naturalidad y no les afecta a nivel psicológico. Sin embargo, hay otros que sí que son afectados negativamente. La alopecia puede producir un descenso de la autoconfianza y barreras psicológicas que impiden llevar una vida normal.
Para ellos, perder pelo se traduce en envejecimiento y un aspecto físico poco saludable.
Alopecia femenina y consecuencias psicológicas
El caso de las mujeres es algo más complicado. Desgraciadamente la calvicie femenina representa un tabú para la sociedad. Según los estándares de belleza, una mujer tiene que lucir una bella y frondosa melena. Por lo tanto, las repercusiones psicológicas para las mujeres son mayores.
En definitiva, podemos decir que una buena parte de las personas que sufren de caída de cabello tienen una autoestima baja, peor calidad de vida y sensación de no tener una apariencia bonita. Entre otras consecuencias encuentran los problemas de identidad en los individuos que sufren de alopecia en las cejas.
Tres percepciones diferentes
Por norma general existen 3 percepciones diferentes cuando alguien empieza a percibir que esta sufriendo de alopecia:
- Las personas que luchan y que quieren evitar la caída del cabello. Estas personas sacan como conclusión que la alopecia es algo negativo y deciden luchar contra ella. Tienen la creencia que sin pelo se verán menos atractivos, envejecidos y van a luchar utilizando productos anticaída y tratamientos de cirugía capilar.
- Los que aceptan la alopecia y se lo toman con naturalidad. Este grupo de personas considera que la alopecia les hace mas atractivos, mas viriles y deciden lucir su calvicie con naturalidad y orgullo.
- Los que niegan la realidad y quieren disimular el problema. En este caso, estos individuos intentan negar la realidad y van a disimular la calvicie con peinados, sombreros, gorras y hasta peluquines. Sin embargo, como están negando la realidad no se interesan por tratamientos farmacológicos o quirúrgicos.
Estas 3 situaciones son fruto de nuestros valores sociales y creencias y no tienen tanto que ver con el hecho de sufrir de alopecia. Es por ello que observamos que cada individuo es un mundo y afronta su alopecia de mejor o peor manera.
Tratamiento psicológico
Cuando una persona acude a un psicólogo debido a una alopecia no podemos cambiar la situación que le esta generando el sufrimiento, en este caso la alopecia, pero si que se puede trabajar el punto de vista de la persona y conseguir que cambie de percepción. De esta forma se tomarán su problema capilar con más naturalidad y aceptando la realidad.
Tratamiento quirúrgico y farmacológico
Como ya sabemos, no todas las alopecias son operables. El cirujano, durante la primera consulta, evaluará el tipo de alopecia del paciente y determinará la técnica que se adapte mejor.
El injerto capilar es, hoy en día, el único tratamiento que permite recuperar el pelo ya perdido. Nosotros somos expertos en técnica FUE, que consiste en extraer cada unidad folicular individualmente para luego ser implantadas una a una.
Para poder optar al injerto capilar se deben reunir una serie de requisitos:
- El principal requisito es que la alopecia sea quirúrgica y estabilizada
- Una zona donante con capacidad suficiente
- Debemos conocer el factor causante y erradicarlo (androgenismo, estrés, mala alimentación…)
Tratamiento farmacológico
Los dos medicamentos aprobados por la FDA (Food And Drug Association, USA) son el Finasteride 1mg/día y el Minoxidil tópico del 2 al 5%. Pero los estudios han ido avanzando y hoy en día disponemos de una gama más amplia de tratamientos médicos con evidencia científica para su uso.
La principal finalidad de la medicación es estabilizar la alopecia, es decir, que el paciente mantenga a lo largo del tiempo el pelo nativo presente en el momento de comenzar el tratamiento. En algunos casos podemos también observar una mejora de la calidad del cabello, pero no siempre es así.
Como conclusión, si estas sufriendo de alopecia y esto te impide llevar una vida normal, no dudes ponerte en contacto con profesionales que te ayudaran a sobrepasar las barreras psicológicas que estés atravesando.